Saturnino Sánchez de la Nieta y Lebrusán (1849 - 1926)
SATURNINO SÁNCHEZ DE LA NIETA Y LEBRUSÁN (Fuentes del Fresno -Ciudad Real-, 29 de noviembre de 1849 - Jaén, 23 de octubre de 1926)
Personalidad que dejó huella en el entorno de la parroquia de San Bartolomé.
En 1866 vino a Jaén acompañando a otro ilustre manchego, el
cardenal Antolín Monescillo y Viso, obispo de Jaén en los años de 1865-1877. En
Jaén completó y finalizó sus estudios eclesiásticos que coronó con el doctorado
en Cánones y Sagrada Teología. Desde 1867 a 1877 fue Mayordomo, Capellán y
Secretario particular de Antolín. Amparado y alentado por su mentor, pronto se
convirtió en uno de los elementos básicos de la curia diocesana.
Fue profesor de Teología durante veinticinco años
(1872-1897) en el Seminario, donde además ocupó otras cátedras y
responsabilidades. En 1874 se le propuso para un beneficio en la Catedral de
Toledo, al que renunció. Dos años más tarde, por oposición, fue designado
párroco de San Bartolomé, puesto que desempeñó hasta 1882. En 13 de mayo de
1882 se le nombró canónigo de la Catedral de Jaén y en 14 de marzo de 1892 fue
promovido a la dignidad de Maestrescuela. Ya en 1878 había opositado a la
canongía Lectoral.
Apoyado por un importante grupo de capitulares, en 1893 se
le quiso proponer para Deán, si bien -según se decía- renunció a favor de Francisco
Fernández Sánchez, secretario del obispo González. Durante dos años (1897-1899)
fue Provisor, Vicario General y Delegado de Capellanías en Segovia, retornando
a Jaén por razones de salud.
En 5 de mayo de 1902 fue nombrado Arcediano de la Catedral
de Sevilla, cargo al que renunció por no ausentarse de Jaén. Posteriormente, en
23 de septiembre de 1908 accedió a la dignidad de Deán de la S. I. Catedral de
Jaén.
Por sus servicios a la Iglesia, en 1888 recibió la cruz Pro
Eclesia et Pontifice. En 1924 se le tributó un caluroso homenaje al imponerle
la Cruz del Mérito Militar cuyas insignias, de oro y brillantes, se costearon
por suscripción popular, destinando el remanente de la suscripción a socorrer a
los pobres de la feligresía.
Era voz común que al menos en tres ocasiones su nombre
figuró en terna para posible nombramiento como obispo de una diócesis española,
prebenda que rechazó con insistencia, si bien en la última ocasión no se
consideró oportuna la propuesta en razón a los informes confidenciales llegados
a la Nunciatura sobre su controvertida personalidad.
Dado su ascendiente entre el clero, por tres veces fue
designado Vicario Capitular tras el traslado del obispo Guissasola en 1902, el
fallecimiento de Salvador Castellote en 1906 y el traslado del obispo Laguarda
Fenollera en 1909.
Dotado de una gran capacidad de gestión y no tanto de dotes
para el día a día de la pastoral, supo mantener intacta la influencia y el
prestigio ganado a la sombra de su protector el obispo Monescillo. Y
extrañamente fue pieza clave en la Curia Diocesana durante los pontificados de Manuel
María González y Sánchez (1877-1896), Victoriano Guissasola Menéndez
(1897-1901), Salvador Castellote Pinazo (1901-1906) y Juan José Laguarda
Fenollera (1906-1909), época en la que al decir de uno de sus parientes en Jaén
se le tenía por “el amo de la Diócesis”.
Su influencia empezó a decaer con el obispo Juan Manuel Sanz
y Saravia (1909-1919) que, aunque le mantuvo en sus puestos por razones de
prudencia, fue muy crítico con su persona y su actuación, lo que hizo que poco
a poco Saturnino, aquejado de una enfermedad crónica, se fuese retirando de la
vida pública, si bien en Jaén se le siguió considerando una relevante
personalidad, lo que hacía que su despacho fuese muy concurrido de gentes de
toda clase y condición que buscaban en él consejo, orientación, apoyo o
simplemente un tertuliano culto y bien dotado para la confrontación de ideas,
por lo que su domicilio, próximo a San Bartolomé fue durante muchos años un
inexcusable punto de referencia para la sociedad local.
Y aunque ideológicamente estuvo cercano al tradicionalismo,
-se decía que era el depositario en Jaén del espíritu del Cardenal Monescillo-
siempre supo mantener buenas relaciones con toda la clase política local, que
le tenía en gran estima.
En julio de 1922, a petición propia y por su delicado estado
de salud, la Santa Sede le concedió la jubilación pasando a la condición de
“emérito” y recluyéndose en su domicilio al calor de sus hermanas y sobrinos.
Falleció a las nueve de la mañana del 23 de octubre de 1926.
Por acuerdo municipal de 11 de febrero de 1911, el Ayuntamiento, a propuesta
del concejal Francisco Rodríguez López, acordó dar su nombre a la Calle del
Marqués del Cadimo, donde tenía su domicilio. El rótulo, de mármol y bronce, lo
realizó el escultor local Miguel Jiménez. La lápida, luego de estar expuesta a
la admiración pública en el escaparate del comercio de Fernando Muñoz, se
descubrió en solemne acto celebrado el 18 de agosto de 1911 en el transcurso de
los actos de la tradicional “Feria de Agosto”. La circunstancia de que la calle
se rotulase como “Calle del Doctor Sánchez de la Nieta”, ha motivado no pocos
equívocos, pues muchos siguen creyendo está dedicada a un médico y no a un
clérigo. Lastimosamente la placa se retiró en la década de los setenta del
pasado siglo al demoler el edificio sin que se haya repuesto ni nadie dé razón
de su paradero. Como hemos apuntado anteriormente, su peculiar condición de
gestor no propició precisamente su intervención en actos específicamente
cofrades pues no le atraía especialmente la predicación y limitaba bastante sus
actuaciones públicas. Con todo, por su condición de antiguo párroco y su
permanente vecindad con San Bartolomé, mantuvo buenas relaciones con la
cofradía del Cristo de la Expiración, a la que prestó en ocasiones su
colaboración, tanto desde la Catedral como desde la Curia Diocesana, aunque
inexplicablemente no quiso predicar en fiestas ni septenario. A Saturnino le
correspondería la aprobación en 1 de junio de 1925 de los renovados Estatutos.
Calle Doctor Sánchez de la Nieta: Distrito Casco antiguo - Barrio San Bartolomé
Enlaces en la Red:
1. http://www.religionenlibertad.com/doctor-sanchez-de-la-nieta-39989.htm “Doctor Sánchez de la Nieta” Tomás de la
Torre Lendínez
2. http://www.expiracionjaen.net/images/PDFBoletines-Regnavit/exp66.pdf “Don Saturnino Sánchez de la Nieta y Lebrusán”
Manuel López Pérez
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